Hace unos años, cuando este que escribe era pequeño, esto de las elecciones no se vivía, empecé a vivirlo durante la mili y claro está me lo creía todo. Para nuestros abuelos, votar, era algo increíble, por no decir impensable. Pero han sido ellos quienes por tener mucha vida en sus espaldas han abierto antes los ojos. Si, ahora, todos vamos espabilando y nos damos cuenta de que es tiempo de promesas y de mentiras, de que es tiempo de que una pandilla de buitres le alaguen el oído a aquellos que aun creen en que los burros vuelan, tiempo en que de la noche a la mañana te crece el numero de amigos y es increíble ver como hasta parásitos de la más alta graduación te pasan la mano por la espalda como si te conocieran de toda la vida.

Soy de una tierra agraciada en corrientes de agua y llanos llenos de sembrados de cereales, Salamanca. Esto ha hecho que siguiendo el cauce de cualquiera de nuestros ríos te topes con un viejo molino a cada pocos kilómetros. Y esto a su vez, ha llenado de frases sabias nuestra memoria. A una de ellas dedico hoy estas lineas, a una frase que en mi tierra, en los alrededores de Villavieja de Yeltes, nació para hacer ver que en esto de la política todos sus protagonistas son los mismos perros con distinto collar. Nació, esta frase, para hacer evidente y claro que hay cosas que están escritas, que por mucho que lo intentes nunca cambiarán. La frase es aquella que decían los aldeanos de "DE MOLINERO CAMBIARAS, PERO DE LADRÓN NO" haciendo ver que todos son iguales. Y que bien le viene a estas fechas ...
Pero he aquí que hoy en día aun hay quien cree en milagros, quien sueña con un futuro de fábula al prometerlo ciertos elementos y creerles por su fácil verborrea y demagogia cuando hay cosas que no van a cambiar nunca. Unos han de votar a otros vivan del sudor de los primeros.

No se dan cuenta de lo evidente ni aun cuando están viendo que están jugándoles la vida y el futuro con el juego de los vasos y el garbanzo con vasos transparentes y tu eres el de la banca. Vamos a perder los mismos y van a engordar distintos "molineros". Pero, qué es mejor, eso o que engorde siempre uno...
Vamos a rogar porque algún día uno de esos "molineros" se compadezca y juegue el con la banca. Con suerte, puede que ganemos alguna vez.